Señor, ayúdame a escucharte decir
"Yo soy tu esperanza"
sobre todas las demás voces.
Señor, tu palabra dice que eres la esperanza
de la desesperanza, así que corro hacia ti
con ambas manos extendidas
y agarrándome de ti.
Lléname de esperanza
y dame un recordatorio tangible hoy
de que la esperanza es una cuerda
de salvamento espiritual irrompible.
Dios, sabes esas cosas en mi corazón
que apenas me atrevo a desear,
hoy te las doy, te las confío y te las pido
porque sé que puedes hacer
más de lo que jamás podría adivinar,
imaginar o solicitar en sueños más salvajes .
Dios, eres mi esperanza y yo confío en ti.
Amén.
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